Categoría: Cuentos

  • Corriendo, Nadando

    dibujito, G. Alfredo Ramirez O.
    dibujito, G. Alfredo Ramirez O.

    » El tío salió corriendo y se dío cuenta que estaba nadando»

  • Primer Movimiento

    Tres Movimientos

    Primer Movimiento

    Otra vez llueve. Otra vez neblina. Otra vez obscuridad.

    No es que me moleste la lluvia,

    No es que te moleste la neblina.

    Es sólo que está obscuro y con el agua, es decir la humedad el frió se siente en los huesos. Es decir, penetra hasta el tuétano.

    Además no es lindo salir a laborar de casa cuando está obscuro y no es lindo regresar a casa obscuro también, eso si regresas, ya sabes…la ciudad.

    Así son las grandes ciudades, un día sales y la ciudad te come, así nada más y tú osea yo, nada que te comió. Como también hay días que yo, osea tú, te comes la ciudad.

    Pero hoy no. Hoy la ciudad está dispuesta a comerte, hoy está dispuesta a atragantares contigo, conmigo.

    Eso lo sabes, pues ella te avisa desde el momento en que te levantas vas al baño, me ducho, tomas el café y en todos esos instantes lo sabes, ella te avisa. Te va a comer hoy.

    Yo por lo pronto, tu estas pendiente con todos los sentidos sensiblilizados, piensas si vas a trabajar o no, tal vez convendría no ir. Pero mejor voy.

    No puedes dejar de hacer tus cosas a cada aviso que te envía la ciudad, te paralizarias absurdamente y me perdería el peligro de vivir.

    Por lo que sales a la ciudad a obscuras, siguió pensando que hubiera sido mejor no salir, pues te encuentras muy tenso por los avisos previos. Todos los sentidos están tratando de obtener toda la información posible, estas alerta y en alarma. Camino con cuidado pero con paso apresurado, no vaya a ser. No vaya a ser ¿que? No lo sabes pero mejor no vaya a ser.

    Llegas por fin a trabajar, ¿lugar seguro? sin luz del Sol, y como va a haber si esta todo obscuro y nublado afuera, y como la va a haber si no hay ventanas en el edificio donde trabajo, solo el sumbido de las lamparas de neón hacen sentir el poco calor de esa luz blanca y eléctrica.

    Con el trabajo monótono te olvidas de lo comida y me olvido de ser comido. Buscas con desesperación los 20 centavos de tus cuentas que no aparecen. No encuentro el error y nadie sabe que es lo que estas haciendo, ni el jefe pero ahí te tienen con la preocupación de veinte centavos. No los encuentras y si se dan cuenta, no sé lo que va a pasar. Igual ya de noche optas por ponerlos, dejarlos perdidos y acabar la jornada con el regreso a casa, un regreso nuevamente obscuro y nublado con el sentimiento de ser un inútil, así voy dando camino a casa. Te olvidas en ese caminar de todo, de los veinte centavos, de la monotonía del trabajo, de tu inutilidad, de la advertencia de la mañana…de todo. Sólo quiero llegar a casa, un semáforo que se ponga en verde y ya estás en casa. Verde, y siento como un impulso te eleva por los aires y es un volar, un volar sin alas.

    Otra vez obscuro, no recuerdas nada después, simplemente estas tirado en la calle y siento la humedad, te da miedo de mirar si esa humedad es agua u otra cosa, pues ya no percibes ni el frió ni el calor, ya no percibes nada solo la humedad en el suelo.

    Por fin logro encontrar o controlar mis ojos para poder ver que es lo que te ha sucedido. Veo una persona bajar de un automóvil, y te esta gritando y regañando y yo no entiendo por que si lo último que tenemos en la memoria es el Verde y el volar, pero ningún error cometido…bueno, a parte de los veinte centavos. La persona sigue gritando y tu no lo entiendes es como una bocina defectuosa que no para de sonar.

    ¡Vaya! la ambulancia ya fue por mi, ¡Uf! no era tu sangre sino simplemente agua de lluvia. Pides hablar por teléfono en busca de un amigo y el policía te lo niega y comienza nuevamente a sonar y sonar y sonar la bocina descompuesta con el regaño y la bocina me inculpa y vuelve a sonar y sonar…

    …y tú, es decir y yo, sólo buscas a un amigo…y la ciudad…nos comió.

    alf…

  • Mi Llorona

    Pre cuento: es un cuento, poema dedicado a todos los pueblos del mundo y al de México y Perú, que se encuentran en resistencia en estos momentos. Es un versión mia de la leyenda de la llorona que la tomé y la modifiqué y espero les guste y al final la canción Llorona  intrepretada por Lila Downs. Foto es de la Jornada, la mujer pedió a un ser querido cuando explotó la mina en Coahuila en el 2006 y el crimen de los industriales y  de Estado sigue impune mientras que muchos de nuestros compañeros continuan presos por defender sus derechos.

    Mi llorona

    Dicen que por las noches nada más se le iba en puro llorar.

    ¡Ay! ¡Ay mis hijos que están a punto de morir!

    Gritaba por las calles de mi ciudad, mi señora, mi llorona.

    ¡Ay! ¡Ay mis hijos que están a punto de morir!

    Todo ocurrió poca antes de los señores barbados. En mi ciudad.

    ¡Ay! ¡Ay mis hijos que están a punto de morir!

    Dicen que ella nos trajo y dicen que ella nos cuida.

    Mas aquella noche en Tlatelolco no fue así.

    ¡Ay! ¡Ay mis hijos que están a punto de morir!

    Dicen que esa noche fue una noche 13, que fue en Agosto, que fue en un año que no era el nuestro, 1521.

    Dicen que esa noche volvió varias veces a Tlatelolco

    ¡Ay! ¡Ay mis hijos que están a punto de morir!

    Dicen que fue a traición, suyo fue el hijo, suya fue la hija, quien traicionó.

    ¡Ay! ¡Ay mis hijos que están a punto de morir!

    ¡Ay! ¡Ay mis hijos que han muerto!

    Dicen que mi llorona siguió llorando por tantos años de oscuridad.

    ¡Ay! ¡Ay mis hijos que han muerto!

    Dicen que los barbones, matar a mi llorona ya quieren ellos.

    ¡Ay! ¡Ay mis hijos que han muerto!

    Dicen que todavía llora por mi ciudad, mas dicen que ahora no tanto,

    Pues ya sonríe un poco tanto.

    ¡Ay! ¡Ay mis hijos que no murieron y resistieron!

    Dicen que se juntaron, todos unidos, todos juntitos, para decirle a mi llorona que ya no tendrá por que llorar.

    Dicen que los barbones ya no se saben donde esconderse,

    ¡Ay! ¡Ay mis hijos que todos juntos van a ganar!

  • Volar

    fumffff
    fumffff

    Tras tras, esos es los que sucede en estos casos extraños y agudos de vida. Donde la vida misma solo es un volar.

    Volar por los destinos lejanos y cercanos.

    Había sentido esa necesidad necesaria de volar…no, no y no; no volar con minúscula sino volar con mayúscula, de Volar. De ese Volar gigantesco de ese Volar impresionante. Eso es, había sentido la necesidad de Volar. Tome un poco de vuelo, dale otra vez… Tome un poco de Vuelo y Volé…(así está mejor)

    Empecé con la vuelta pequeña, solo le iba a dar una vuelta al mundo. Pero ¿Por donde empezar? ¿En que dirección? ¿A la derecha o a la izquierda?, ¿Hacia delante o hacia atrás?

    Así que el cuerpo tan solo se enfilo y vamonos para la izquierda y hacia delante y para arriba, con la esperanza de llegar a la Luna para plantarle unos besos.

    Tome la geodésica 3.48 7 bis interior 26A suroeste, este osease que para la izquierda y emprendimos el Vuelo sin muchos contratiempos.

    Empecé a ver los grandes desiertos de arena y de sal. No encontraba diferencia entre uno y otro pero ahí estaba Volando.

    Me percaté de que el Hombre es tan pequeñito que no se le distingue a esa gran distancia, pues recuérdese que he querido alcanzar la Luna en un principio, mas para ver al Hombre decidí bajar un poco más.

    Lo buscaba y buscaba desde las alturas, pero nada, no se veía nada o más bien a nadie.

    Siempre pensé que si uno se aleja la perspectiva cambia y que desde allá arriba podría ver al Hombre un poco distinto, tal vez hasta lo entendería. Pero no fue así; el Vuelo me permitió darle sus besos a la Luna y ver los océanos y las montañas, los desiertos y la selvas, pero no ver y conocer al Hombre.

    Tuve que bajar un tantito más, y pensé que ahora si lo podría ver. Pero no, solo veía aglomeraciones de casas, pero seguía sin distinguirlo.

    Y yo que soñaba con Volar para poder cambiar la perspectiva.

    Entonces baje un poco más, me tuve que apresurar pues me encontraba nuevamente encima de esos grandes bosques donde el Hombre se me esconde.

    Por fin en mi Volar empece a ver al Hombre el estaba muy pero muy apretado.

    Volar a baja altura ayuda a distinguir un poco a los Hombres, pero no del todo, pues todavía no lo conocía. Tuve que volver a bajar un tanto más y pensé que ahora si lo conocería, si lo vería y si cambiar mi perspectiva.

    Pero no, no fue así, ya que mi Volar era demasiado aprisa aún para sus carros y para sus trenes y para sus autobuses.

    Tuve miedo de bajar más, empezaba a correr el riesgo de estrellarse con alguna banqueta y de conocer únicamente sus pies, además que las maniobras requerían cada vez más precisión.

    Fue por lo que decidí dejar de Volar y empezar a caminar. Y ¡plum! a caminar.

    Pero nadie me veía, nadie se acercaba, nadie hacia un gesto, todos de prisa como yo cuando Volaba.

    Por lo que caminando comencé a Hablar y a Cantar y a Escuchar y me di cuenta que otros estaban Cantando y Escuchando y Hablando. Y Fue cuando mi perspectiva cambió y comencé a conocer al Hombre y por supuesto a la Mujer, Escuchándolo, Hablándolo y sobretodo Cantándolo.

    Al final Volar fue solo un capricho…

    ¡Tierra, Agua y Libertad!

    alf…

  • El día en que nos caímos pa’ arriba

    Nos han contado los físicos que existe la Ley de la Gravedad, es esta le fue revelada a Newton bajo un manzano.

    ¿Creemos la historia?

    ¿Creemos el cuento?

    Bueno, ahora nos dicen que existe una Ley inquebrantable, la Ley de la Gravedad.

    Todos, absolutamente todos los objetos por el hecho de tener masa se atraen entre si. Al ser la Tierra de gran masa, esta nos atrae hacia su centro.

    Luego: ¿Por qué?

    ¿Puede pasar que cuando aviente el lápiz caiga para arriba?

    No lo sabemos bien, lo más seguro es que no, pero hubo un día en que la inseguridad de la Ley de la Gravedad estuvo fuertemente en duda.

    Todavía no conocía a Newton. Todavía no sabía de Leyes. Yo no estaba del todo seguro de que el Mundo funcionara como dicen que funciona. Aún hoy en día no estoy seguro de que el Mundo funcione como dicen que funciona. Yo más lo veo un poco muy disfuncional.

    El día aquel fuimos a escuchar un concierto.

    Seguro fue un concierto…, de esos autores grandes, seguro fue Händel o Bach o Beethoven o ¿Mozart?

    Tal vez fuimos a ver a la Maja vestida y desnuda de Goya. También pudo ser eso.

    Lo más seguro es que fue a un grande a quien fuimos a percibir con nuestros sentidos. Y fue a uno de los grandes a quien nuestros sentidos desafiaron.

    Al subir por las escalinatas fue cuando el Arte en su palacio desafió a la Física.

    Subimos la escalinata y llegamos ahí a un paso antes de la cúpula, a un paso antes del espacio, observamos como podíamos caer para arriba…

    Ahí se desafío la Ley de la Gravedad, como toda Ley debe ser desafiada y en ese lugar el Arte domino a la Física y ¿Newton?…

    Sigue soñando bajo un manzano.

    alf…

  • Los Lunáticos

    Una vez más estábamos en la despedida.

    Nos llaman Lunáticos.

    Nosotros nos llamamos a nosotros mismos:

    Los que viven en el ombligo de la Luna.

    ¿Cómo es que llegamos al ombligo de la Luna?

    ¿Cuándo nos empezaron a llamar Lunáticos?

    Fue hace muchas Tierras, en fecha terrestre fue un 2 de octubre de 1968 o ¿tal vez fue un 10 de junio de 1972 o tal vez fue un 22 de diciembre de 1997 o tal vez fue un 6 de febrero de 2000 o tal vez fue un 3 de Mayo de 2006, o tal vez fue un 25 de noviembre de 2006 o tal vez…?

    Seguro que fue un 13 de agosto de 20??

    En ese entonces no había razón para que nos llamaran Lunáticos, pues no habitábamos precisamente la Luna, todavía vivíamos en la Tierra y trabajábamos y disfrutábamos en ella.

    ¿Y la Luna?

    Esta nos acompañaba al soñar y nos era fuente de inspiración. Fue por eso que nos llamaron Lunáticos, fue porque estábamos construyendo otra cosa muy nuestra. Esa vida más bonita y armónica, esa otra vida, pero a ellos no les gustaba que nosotros ya no estuviéremos esclavizados a ellos, ni nos dejáramos. Pues habíamos estado buscando la Libertad por todos lados y la habíamos encontrado.

    Luna Codicé Borgia, 55
    Luna Codicé Borgia, 55

    Ya mucho tiempo era en que la belleza era nuestro argumento.

    Pero ellos, que todo lo quieren y que todo lo compran y venden y por quererlo todo solo para ellos destruyen lo nuestro, nuestra otra cosa. No soportaron nuestro encuentro con la Libertad que no se compra ni se vende, no soportaron nuestra belleza que no se vende y por eso decidieron destruirlo todo.

    Atenco 4 de mayo 2006, foto: Jesus Villaseca
    Atenco 4 de mayo 2006, foto: Jesus Villaseca

    Más nosotros no nos dejamos y peleamos y ellos nos golpearon, nos encerraron, nos mataron y después nos mandaron a la Luna.

    Fue así, que un día nos hicieron Lunáticos aunque no lo queríamos.

    Al principio fue muy duro, pero como ya no teníamos escapatoria tuvimos que volver a hacer lo que ya sabíamos hacer. Que fue, construir la belleza.

    Hubo cosas a las que nos tuvimos que adaptar al vivir en la Luna, una de ellas es que el día era muy largo y la noche también, por lo que para poder descansar bien construimos dos campamentos uno en el ombligo oscuro de la Luna y el otro en el ombligo iluminado de la Luna, justo junto al Conejo. Con el tiempo los pueblos se fueron haciendo pueblos-ciudades.

    Fue así como tuvimos dos casas en ambos ombligos de la Luna. Lo construimos todo como en nuestros mejores sueños.

    La cuidamos de no destruir su forma natural, su Conejo.

    Hasta que un día nuevamente llegaron ellos. Ya no había nada en la Tierra, pues ya habían acabado con todo, así que nos siguieron a la Luna.

    Nos mostraron papeles donde, según ellos, eran propietarios de la Luna, pues según ellos habían llegado antes que nosotros. Lo que no sabían es que nosotros ya estábamos ahí desde ese 13 de marzo de 1325.

    Fueron de esta forma apareciendo muchas cosas que antes no había en la Luna. Palmeras y bulevares donde no había. La Luna estaba ya siempre iluminada, ya no tenía periodos, ya no ayudaba a soñar.

    Construyeron grandes edificios, aun más altos que los que hubo en la tierra, ya que les daba ciertas ventajas la fuerza de gravedad lunar y también construyeron monumentos a ellos mismos.

    Descubrieron oro en ambos ombligos de la Luna, así que fueron perforando a la Luna y cambiando la forma del Conejo para que ya no fuera Conejo en la Luna. Habían venido con todo para destruirlo todo lo que a nosotros tanto trabajo y gusto nos había costado hacer.

    ¿Y nosotros?

    Nosotros no nos dejamos. Por lo que ellos volvieron con las armas y nosotros como lo único que habíamos construido allá arriba era la belleza sólo teníamos palos y piedras para defendernos.

    Oaxaca 2006
    Oaxaca 2006

    Por el oro nos orillaron a vivir en los polos. Ya no teníamos comunicación entre nosotros los del polo A y los del B, solo nos dejaron un pequeño corredor de unos 4 metros de ancho que ellos cerraban cuando se les antojaba, o cuando nuestra rebeldía aumentaba y nos negábamos a ser esclavizados.

    Construyeron Muros y Muros para que ya no pudiéramos salir de los polos.

    Ya no teníamos nuevamente a donde ir, pero ahora en la Luna. Por lo que decidieron…

    Fue cuando desperté en la Tierra ¿y tú? ¿Dónde te encuentras tú antes de que nos quiten todo a todos?

    Tierra, Agua y Libertad

    Presos Políticos Libertad

    Alf…

    Ayer Atenco, Hoy la APPO,...,Mañana ¡Tu!
    Ayer Atenco, Hoy la APPO,…,Mañana ¡Tu!
  • Dos Periquitos

    Una mañana soleada de septiembre, como a eso de las nueve, afuera, al pie de una escalera, nos comenzó a llamar la atención un griterío en un pino.

    Un griterío en la mañana, acompañado de movimiento, de un aleteo de ir y venir de arriba a bajo, sobre y dentro de la copa de un pino.

    Tanto ruido nos hizo empezar a buscar la fuente de este. ¿Quién hacia tanto escándalo?¿Qué pájaro podía hacer tal griterío?

    No, no eran cuervos, no, no eran golondrinas, ni gorriones, no, tampoco águilas, ni pichones.

    No, nada de eso, era un par de periquitos, pero ¿qué hacía ese par tan al norte?

    Estaban construyendo un nido, pero ¿tan al norte, en libertad, en un pino?

    Escaparon, ya esta.

    Sí así fue, escaparon del encierro en que estaban destinados a vivir, tan lejos de sus tierras.

    Eso fue en una hermosa tarde de mayo. Lo habían preparado todo desde el último verano.

    El plan no era muy complicado, más requería de precisión, paciencia y prudencia.

    Primero: idear una forma de salir de la jaula.

    Segundo: una vez afuera tener las alas suficientemente largas y fuertes para poder emprender el vuelo a la libertad.

    Para el primer paso aprendieron a bailar y cantar un par de canciones, escogieron “Que te pasa” y “Mala vida”. De esta forma el amo fue sacándolos de vez en cuando de sus prisiones, pues le parecía muy cotorro que sus periquitos bailaran y cantaran sin que el les hubiera enseñado.

    El problema seguía siendo el tener las alas cortadas y débiles, por lo que pasamos a ver como resolvieron el segundo punto.

    Durante los meses que duró su plan de escape estuvieron escondiendo las puntas de las alas de tal forma que el amo no se diera cuenta de que tan largas las tenían, así fue como evitaron que les cortaran las alas.

    En cuanto a la resistencia y a la fuerza, el trabajo fue nocturno y silencioso. Mantenían las alas abiertas durante largos periodos de tiempo, durante las noches, todo para obtener fortaleza y evitar el aleteo, pues nuevamente esto podía ocasionar que el amo recordara cortarles las alas.

    De esta forma y con mucha paciencia el plan se fue realizando, hasta que una hermosa tarde de mayo como a las 4, el amo los sacó a cantar y bailar y ellos…escaparon, mas no encontraron el camino a casa, pues están tan al norte y la fuerza no les daba para llegar mucho más lejos y tuvieron que tomar la decisión de quedarse a vivir tan al norte en un pino, pero en Libertad.

    Ahora que los vimos, en esa mañana de septiembre, nos parecía que estaban más adaptados a estas nórdicas regiones y estaban preparando su nido para el invierno…En Libertad.

    ¡Tierra, Agua y Libertad!

    ¡Presos Políticos Libertad!

    alf…

  • Una muy breve clasificación de Los bostezos

    Una muy breve clasificación de Los bostezos.

    Por el Viejo Grodecz.

    Transcripción de alf.

    Cuentan que los tenemos cuando ha habido una larga jornada, cuentan que los tenemos cuando nos estamos aburriendo, cuentan que los tenemos cuando el sueño esta por entrar.

    Cuando los sueños quieren entrar no hay forma de pararlos, ni con garrote se paran estos, mas hoy no trataremos de ver cuando estos entran por sueño, sino por cansancio y aburrimiento.

    Esta será una breve historia de clasificación de bostezos.

    El aburrimiento, este puede tener varias causas, una que es la más común es cuando estamos esperando algo y no hay nada que hacer más que esperar, como esas largas filas de espera para realizar tramites o estar esperando que un medico vea tu mal. También lo sufrimos cuando estamos en un salón de clases, (ah, cuantas veces no hemos tenido un momento de eso, pueden ser los más desesperantes, pues no se vale dormir) el sueño y el aburrimiento entra cuando se le entiende todo al profesor o cuando simplemente ya no estamos con él, cuando el profesor ha abandonado a sus alumnos y estos ya se encuentran perdidos.

    Fue esos momentos en un salón de clases cuando el viejo Grodecz hizo una breve clasificación de los distintos bostezos dentro de un salón. Todo siempre en pos de la ciencia.

    A continuación una clasificación dada por el viejo Grodecz:

    1. El bostezo de lagrimita. Este consiste en un bostezo retenido donde la persona que bosteza le es demasiado bochornoso, por lo cual mantiene la boca cerrada, como consecuencia emerge de uno de los ojos una lagrimita indicando el bostezo. Comúnmente lo tienen los alumnos que se encuentran en las primeras bancas cerca del profesor.

    2. El bostezo Tarzan. Este bostezo siempre va acompañado de un grito de guerra. Es el grito de guerra del sueño que quiere entrar, es ese grito retador y valiente.

    3. El bostezo de aspiradora. Para detectar este bostezo el profesor observar como el gis del pizarrón comienza a desprenderse rápidamente por la succión tan grande que el individuo realiza al bostezar, por lo que es recomendable sostener fuertemente el gis y en casos extremos el borrador. (Aunque si la succión alcanza a llevarse el borrador, ayudara a que el alumno se mantenga despierto, después de la embestida del borrador en la boca.)

    4. El bostezo del apretado o el bostezo olímpico o de la victoria. La persona se intenta liberar del sueño por medio de extender todas sus extremidades mientras bosteza, y a los ojos de los observadores pareciera que esta llegando a la meta después de una larga carrera victorioso.

    Advertencia.

    El siguiente bostezo, no hemos sido testigos de él. Por la descripción de este podemos decir que ha sido una fortuna no haberlo atestiguado, mas cuenta el viejo Grodecz que desafortunadamente ya ha tenido una experiencia con este bostezo.

    La advertencia va dirigida a todos los lectores de estómagos sensibles, por lo que se les sugiere no continuar con la lectura del inciso 5, mas si llegar al termino de esta clasificación. Es decir que el cuento no ha acabado aquí en caso de no leer el inciso 5.

    1. El bostezo del al revez volteado. Este es un bostezo de gran intensidad, es una combinación del Tarzan y el de aspiradora plus ultra (en el caso de que el profesor allá sostenido el gis y el borrador fuertemente para no despertar al alumno). El alumno en cuestión comienza el bostezo con un Tarzan seguido de una súper aspiración, continua con una apertura gigantesca de la boca (muy parecido a como lo hacen las boas) gracias al desprendimiento de la quijada por la intensidad del bostezo, es en ese momento cuando el bostezo pasa al estado critico pues el individuo por la succión comienza a voltear todo su cuerpo y de repente ¡plup! (como cuando se destapa una botella de vino) y todo lo que se encontraba afuera en ese momento se encuentra a dentro y todo lo de adentro se encuentra afuera. Para ejemplificar es como cuando uno voltea una bolsa o una mochila. A continuación como ayudar a alguien que se encuentra enredado en tan penosa situación. (Nota: Siempre es bueno saber que hacer en los casos de emergencia y como reaccionar, pues se pueden cometer una barbaridad de errores en esos momentos de tensión.) En el penoso caso de que se encuentre con alguien en esta situación, la mejor forma de ayudar es primero comprobar que el individuo se encuentra aun despierto. En el caso de que se encuentre dormido habrá que despertarlo lo más pronto posible pues la quijada puede volver a su lugar y resultara muy difícil volver a voltearlo, además que siempre es más fácil mover los músculos cuando estos todavía se encuentran calientes. Al comprobar que el alumno se encuentra despierto o despertarlo pedirle que extienda sus manos lo más que le sea posible para tomarlas y con ayuda de todo el grupo jalar de un solo golpe al individuo hasta que este regrese a su forma original. En el caso que ya se encuentre algo fríos los músculos y la quijada no se encuentre ya más dislocada, la ayuda será muy difícil y ni hablar de cochinero que se puede volver eso. Por lo que es muy importante a ayuda inmediata.

    (Otra nota: Cuando se da el caso de que alguien hace el bostezo de al revés volteado será el último que se haga durante esa clase.)

    Esta son las 5 distintas clasificaciones que dio el viejo Grodecz a los distintos bostezos. Hemos decidido escribirlas, pues como siempre dice el viejo Grodecz aquello que no se escribe se pierde, y tan importante clasificación seria una pena perderla para siempre. De esta forma queda el registro para que en el futuro se pueda identificar un bostezo en un salón de clase, y en el caso extremo como ayudar. Esta clasificación no es la última ni la definitiva, ya que puede ser aumentada y mejorada como todo proceso científico.

    Alf…( el joven Grodecz)

    P.D. Lo que el viejo Grodecz olvido decir es que no solo hay que escribirlo sino también publicarlo, por eso nos hemos dado la libertad de compartirlo con ustedes.

    Otra P.d. más: Esperamos que el viejo Grodecz no continué clasificando bostezos frecuentemente o que sea testigo de los bostezos aquí clasificados, ya que podría indicar que o sus clases son sobre temas muy difíciles o son muy aburridas. En ese caso nos gustaría suponer que si esto sucede es por la dificultad de sus clases.

    ¡Ups! El cuento acabó en el inciso 5. Bueno pues ni modos.

    Anexo inciso 6 de la señorita r agradeciéndole tan valiosa contribución a la clasificación de los bostezos.

    6. Aquel que emite, por lo regular una mujer, para advertirle a algún personaje -por lo general hombre-, que sus intentos por persuadirla mediante la chipilonería -manipulación «cariñosa»- no funcionará. En realidad, el bostezo aquí es más social que biológico y además de ser acompañado por una delicada obstrucción del bostezo con la mano, es seguido por una o varias señas con la mano derecha -si se es diestro- hacia arriba y hacia abajo, que refuerza el sentido de menosprecio -«afectuoso»- evocado por este singular tipo de bostezo.

    Zaz.

  • La Niña que salta

    Esta es la pequeña historia de una niña.

    Esta es la pequeña historia de una niña morenita, de ojos largos y negros, pelo largo y negro de idioma incomprensible, para nosotros.

    Esta es la historia de una pequeña niña que le gustaba saltar. Ella saltaba cuando estaba contenta y cuando estaba triste.

    Esta niña por supuesto que tiene nombre, las estrellas se lo habían puesto, este le fue dado cuando la niña todavía no podía saltar.

    Las estrellas le pusieron Osa… ¿Cuál Osa?… pues la mayor.

    Osa Mayor como ya lo dijimos le gustaba saltar. Todo comenzó con un salto de cuerda. Eso fue de muy niña.

    Después empezó a saltar banquetas, escaleras, charcos, perros y gatos.

    La niña fue creciendo y siguió saltando, muchos de esos saltos ya no los observamos, tal vez por la noche o por la costumbre de verla saltar.

    Ahora la niña después de varios saltos llegó a la ciudad, a esta ciudad, a nuestra ciudad. Claro antes ya había saltado por varias otras ciudades. El problema, es que en cuanto llegó ya se estaba yendo. Tal vez los pies le pedían el siguiente salto, no lo sabemos… o tal vez el corazón lo pedía, pues cuando este pide algo o se le da o se marchita, dicen, pues dicen que es demasiado terco y obstinado.

    A muchos no les dio tiempo de conocerla demasiado, solo su nombre pues ya había pegado el salto. Lo escuchamos en el primer impulso y se nos fue saltando.

    Ffffuuu....
    Ffffuuu….

    El otro día escuchamos que la niña estaba junto a la Mar, se lo escuchamos a un pelicano. Este nos platico y nos contó como la niña dejó de saltar.

    Dice el pelicano que cuando llego junto a la Mar, Osa Mayor estuvo apunto de saltar nuevamente, pero antes de pegar el salto la Luna la regaño, pues el próximo salto era en dirección a la Mar, la Luna no la dejo saltar nuevamente y la Mar le dijo que escuchara y observara, mas Osa Mayor no sabia como hacerlo, por lo que pregunto a la Mar como poder aprender a escuchar y observar.

    La Mar le dijo: estate en la playa, estate en las olas, estate ahí en la tarde, observa al Sol, después me dirás a donde se fue, escúchame bien, después me cantaras mi canción.

    Entonces Osa Mayor estuvo ahí en la orilla, en la playa, empezó a ver como el Sol se ponía. Empezó a aprender a observar, el cielo comenzó a pintarse de hermosos colores; rojos, lilas, morados y azules; mientras la Mar retumbaba y tronaba, ese era su cantar que Osa Mayor comenzó a percibir, que comenzó a cantar.

    Y en le momento en que la Mar se trago al Sol, Osa Mayor no pudo resistir más y salto. Salto para ver a donde se había ido el Sol. ¡Sorpresa! Lo volvió a ver.

    Ahora, cuenta el pelicano, Osa Mayor entra a la Mar todas las tardes para ver una y otra vez a donde se va el Sol…

    alf…

    ¿A donde se va el Sol?
    ¿A donde se va el Sol?

  • Y el Sol salió de Noche

    ¿Cuántas veces había querido el Sol salir de Noche?

    ¿Cuántas veces la Luna se deba el lujo de salir de día? y él no podía salir de noche. Siempre tan ocupado con ese asunto de producción de energía. No es cosa fácil, la Gravedad del asunto de la fusión nuclear lo tenía tan ocupado que no podía salir de Noche. En cambio la Luna, con su señor Conejo pasajero, se daba el lujo de asomarse en el día y de vez en cuando darle al Sol sus besos.

    La Luna le había contado las cosas que sucedían en la Noche, de las frías noches de invierno, del rumor del viento en otoño, del renacer de la primavera, de las cálidas y húmedas noches de verano. También le había contado de la sombra del jaguar en la noche cuando acechaba, de los sueños de los Hombres. De los bailes en verano y del ponche en invierno.

    El Sol solamente podía suspirar, pues no tenía tiempo de ver la Noche. Él quería desesperadamente ver la Noche, qué era lo que sucedía en la Noche. Ver las fiestas en la Noche, ver los acechos, bailar con la Luna en la Noche.

    Así, un día decidió sorprender a la Luna y dejar por un momento a un lado ese tedioso asunto de transformar materia en energía, ponerse un saco y corbata y salir de Noche. Preparó todo, guardó en una cajita todo el Hidrógeno que tenía y en otra cajita el Helio y los demás elementos. Se puso saco y corbata, paró la producción y abrió la puerta y salió de Noche. Tal fue la Gravedad del asunto, que al cerrar la puerta el Sol se trago la Luna, la Tierra y los demás planetas. Por lo que no pudo observar la vida de Noche, simplemente se la tragó. Eso si puede ahora ver las manchas del Jaguar deslizándose por la Vía Láctea.

    alf…

    Ollin